El transporte público se reforzará durante los episodios de alta contaminación

-
Imatge
Más transporte público, puesta en marcha de la T-Verde y la T-aire o aumentar la flota de autobuses menos contaminantes, son algunas de las medidas que han presentado hoy los representantes de la Generalitat, la AMB, el Ayuntamiento de Barcelona y el Servicio Catalán de Tráfico para paliar los efectos de la contaminación en el área metropolitana.

El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull; el vicepresidente de Transporte y Movilidad del Área Metropolitana de Barcelona, ​​Antoni Poveda, la concejala de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, ​​Mercedes Vidal, y la directora del Servicio Catalán de Tráfico, Eugenia Doménech, han explicado esta mañana las medidas que se aplicarán cuando se declaren episodios de contaminación ambiental en nuestras ciudades a partir del 1 de diciembre.

La restricción de tráfico de los vehículos más contaminantes -los que no dispongan de la etiqueta ambiental de la DGT- en la zona de bajas emisiones en el ámbito de las rondas de Barcelona estará acompañada de un importante refuerzo del transporte público, tanto de TMB como los de gestión indirecta del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) con un refuerzo de autobuses metropolitanos de 30 vehículos de los habituales, y de 15 en el Baix Llobregat, y de metro, ferrocarriles y tranvía en las horas punta. También a partir de octubre se activará la T-Verde metropolitana, que otorgará 3 años de transporte público gratuito a quien desguace un vehículo antiguo y contaminante, y se comprometa a no comprar uno nuevo. Las restricciones se aplicarán de lunes a jueves entre las 7 de la mañana y las 20 h, con los viernes pendientes de ajustar.

También se pondrá en marcha un nuevo título de transporte, la T-aire, un título multipersonal de 2 viajes integrados que se podrá utilizar el mismo día de la primera validación y que será válido únicamente en situaciones de episodio ambiental. Además, y para facilitar la circulación de transporte público, el Servicio Catalán de Tráfico instalará un carril bus provisional de entrada a Barcelona en la B23 en el tramo sentido entrada a Barcelona entre Sant Joan Despí y la inicio de la Diagonal.

Estas medidas se suman a las que ya está llevando a cabo la AMB para alcanzar un cambio de modelo en la movilidad metropolitana que permita reducir la polución: renovación de la flota de transporte público hacia vehículos más limpios, híbridos y eléctricos; la no homologación de taxis diesel a partir del 2019; subvencionar la compra de bicicletas eléctricas, con 250 euros de ayuda a los particulares, la construcción de la red ciclable metropolitana o la instalación de puntos de recarga de vehículos eléctricos.

Según explicó el vicepresidente de Transporte y Movilidad, Antoni Poveda, estas medidas persiguen "propiciar un verdadero cambio de hábitos en la ciudadanía. Entre todos tenemos que reducir la contaminación, que afecta directamente a la salud de las personas". Se estima que los niveles actuales de contaminación provocan más de 3.000 muertes prematuras anuales en el entorno metropolitano, aparte de los miles y miles de afectados que sufren enfermedades crónicas directamente relacionadas con esta contaminación.