El domingo fue el día grande del XVIII Encuentro Nacional de los Tres Tombs, con el gran Desfile de carros y carretas, que organizó la Federación Catalana de Tres Tombs y la Colla de Geganters de Sant Joan Despí. En la Rua participaron 55 grupos de Tres Tombs de toda Catalunya que nos han traido a la ciudad más de 100 carros y 400 caballos, con la participación de unos 700 arrieros, carreteros, etc.

El gran pasacalle hizo un amplio recorrido que, desde el recinto ferial, pasó por la avenida de Barcelona, ​​la calle Francesc Macià, Riera d'en Nofre, rambla Jujol, Bon Viatge, Catalunya y Rius i Taulet. No faltó la tradicional bendición de los animales ante la iglesia. Una gran jornada festiva que cerró un fin de semana lleno de actividades y de imágenes para el recuerdo.

No obstante, antes del gran desfile, durante el fin de semana la ciudadanía ha disfrutado de otras actividades como un mercado de campo con más de 50 stands vinculados a la artesanía y el mundo agrícola, una granja, y, incluso una paseo de ocas amaestradas que causó admiración entre los peatones. El sábado se organizaron diferentes actividades vinculadas al mundo del caballo y El Tres Tombs, como el pasacalle de estándares, el espectáculo Caballos de Menorca y un espectáculo hípico de doma natural con coreografías a cargo de Santi Serra, conocido maestro adiestrador de caballos en libertad.

Con el encuentro de este fin de semana, la Federación Catalana de Tres Tombs cierra la temporada de esta tradición que se celebra en muchos pueblos de Catalunya desde principios de año, coincidiendo con la festividad de San Antonio Abad, patrón de los animales.

Homenaje al campesinado
La ciudad rinde homenaje al mundo del campesinado, origen de esta celebración y símbolo del pasado agrícola de Sant Joan Despí, con una escultura. Obra de la artista local Sofía Isus, hace alusión a la manzana, "una fruta muy nuestra, muy identificativa con el tipo de cultivos que había en la ciudad hace mucho tiempo", según ha explicado la propia artista.
Este conjunto escultórico -de 2,4 metros de altura y 2 de anchura- está formado por tres piezas hechas con acero corten, situado en la rotonda urbicada entre la rambla de Josep Maria Jujol y la avenida de Barcelona.